Alquilar tu casa por internet

El impacto en la vida real que han tenido iniciativas como Airbnb hace necesario repasar la situación actual, tanto para arrendadores como emprendedores que se desarrollan en este negocio, para conocer exactamente las reglas del juego.

Hasta hace dos años, la legislación era estatal, basada en la Ley de Arrendamientos Urbanos. Según esta Ley, mientras se tributara por los ingresos percibidos, no había problema en alquilar la casa por períodos cortos.

Después del cambio de legislación, las viviendas consideradas turísticas dejaron de estar incluidas en la regulación estatal, abriendo paso a que las comunidades autónomas pudieran legislar. Todo esto, como en otros aspectos regulatorios, ha llevado a una legislación amplia e irregular que varía muchísimo de unos municipios a otros. 

La utilización de Internet, a través de nuevas plataformas, ha revolucionado el sector turístico. Como ya pasara en otros ámbitos de la economía colaborativa, la revolución tecnológica ha puesto en pie de guerra a los agentes tradicionales del sector, que interpretan este salto de una forma intrusiva y desleal. Para otros es una evolución a la que hay que sumarse y una oportunidad de negocio.

Lo cierto es que el cambio está muy presente, generando una gran cantidad de usuarios y emprendedores explotando todas las posibilidades que ofrece la red.